Las circunstancias actuales del
mundo entero, han llevado a iniciar una serie de cambios en nuestras vidas y la
forma en que nos movemos, interactuamos y realizamos o dejamos de realizar
muchas actividades.
Ahora bien, una actividad que
definitivamente tiene que tener cambios muy drásticos es nuestra amada práctica
de artes marciales. Y no digo que sea algo malo, por el contrario, pero si creo
que hay que exponer determinados puntos a considerar.
Si eres instructor afiliado a
nuestras escuelas o de cualquier organización e incluso independiente, quiero
invitarte a leer esto y tomarte la libertad de copiarlo y usarlo si así lo deseas.
Hemos estado publicando desde
hace algún tiempo, clases privadas con aprendizaje acelerado, hemos también estado
anunciando entrenamiento a distancia, lo que nos ha dado cierta experiencia, y
hemos observado que aparentemente la
gente no parecía aceptar completamente el hecho de poder aprender a distancia, o
demostró cierto grado de desconfianza. Al mismo tiempo, comparado con las
clases presenciales, si hemos de ser sinceros, no ha sido un grupo masivo de
personas el que ha mostrado interés por los programas a distancia, e incluso varios
se alejan al exponerles los siguientes puntos:
·
La mayor razón por la que es importante tener un
instructor, entrenador, coach, o como quieras llamarlo, es que las personas en
un gran porcentaje (me atrevería a decir que un 99%) no tienen la disciplina
para entrenar solos. Necesitan alguien que los esté motivando y dirigiendo a lo
largo de la sesión de entreno/aprendizaje.
·
Un niño es tan capaz de aprender a distancia como
cualquier adulto, porque una de las formas que aprendemos es por imitación;
pero también es importante la interacción, porque otra excelente forma en que
aprendemos es preguntando y obviamente cuando tenemos que responder preguntas. Por
eso el instructor, profesor o maestro, deben estar abiertos a preguntas, pero
hemos podido experimentar que solo los que tienen verdadero interés hacen estas
preguntas.
·
Aunque la clase pueda ser en una reunión grupal
en una aplicación que permita varios participantes en video, debe tener también
una personalización para el aprendizaje de cada quien, no todos aprendemos al
mismo ritmo y no todos avanzamos a la misma velocidad ni asimilamos la misma
cantidad de información. Si tienes dudas, debe preguntar a tu instructor y de
ser necesario deberás gestionar una clase privada para que pueda atender tus
necesidades individuales
·
Estar en un grupo de clase debe ser algo que te
motive, que salga de tu corazón, y para ello debes comprender que ahora que no
es un tiempo en el que vayas a poder asistir a un gimnasio o escuela o dojo, o
como quieras llamarle, debes valorar los muchos beneficios que obtenías en tus
clases, beneficios que se volvieron frases “resobadas” como disciplina,
actitud, balance físico y mental, capacidad de interactuar o trabajar en
equipo, fortaleza física y de carácter, pero sobre todo por salud e higiene física
y mental. Si aprecias los beneficios de tu clase de artes marciales,
comprenderás que es algo que va más allá de un deporte y se llega a convertir
en un estilo de vida.
·
Aprender a distancia no es algo nuevo, inventado
por los maestros en estos días de corona-virus, es algo que varios maestros de
renombre vienen haciendo hace tiempo, aprendiendo a adaptarse y hacer buen uso
de las herramienta que nos brinda la tecnología actual y que seguramente en algún
momento de la historia se verán como algo muy normal y más adelante como algo
obsoleto.
·
Debes tener mucho cuidado de algunas cosas durante
tu entrenamiento en casa, debes cuidar de seguir las instrucciones al pie de la
letra y buscar la forma de hacerlo en un área segura, despejada de objetos con
los que puedas lastimarte (o romper y enojar a mamá), como mesas, macetas,
televisores, conexiones eléctricas, mascotas, etc. debes hacer las cosas con
responsabilidad y con ganas de hacerlo con excelencia, para poder desarrollarte
verdaderamente y evitar lesiones que son producidas muchas veces por
movimientos con desgano y flojera. La responsabilidad de enseñar es de tu
maestro, pero la responsabilidad de aprender bien es únicamente tuya. Al igual
que en el dojo, debes mostrar respeto y disciplina, aunque ahora estés en la
comodidad de tu casa, digamos que en tu territorio, el instructor que te está
dedicando tiempo, espera que tú puedas aprender para que puedas avanzar y
mejorar en todos los aspectos de tu vida.
·
¡OJO! Aunque papi y/o mami te acompañen en tu
entreno, ellos también debe prestar atención a las instrucciones y recordar que
no son el maestro.
·
Los instructores debemos de ser responsables de
la forma en que damos una clase, cuidando de los ejercicios que pongamos, de
manera tal que no puedan lesionar a alguien que no tiene ni la condición
física, ni el entrenamiento, ni la flexibilidad ni el conocimiento que nosotros
podamos tener. He visto muchos problemas de lesiones que se manifiestan al cabo
de los años, en practicantes que no fueron apropiadamente instruidos en asuntos
como los ejercicios de flexibilidad o en el simple posicionamiento de pies y
empleo apropiado de articulaciones.
·
¡¡¡Alerta!!! Si algún ejercicio te está causando
dolor o molestia, tienes el derecho y la obligación de hacerlo ver a tu
instructor, que está obligado a escucharte y buscar una solución, corrección, supresión,
suspensión o cambio de ese ejercicio o la rutina completa.
·
Citando a Grand Máster René
·
Los verdaderos maestros de artes marciales, no
se dan en racimo como las uvas, los maestros (que realmente alcanzan maestría)
deben tener mucha disciplina y dedicar
largas horas a practicar, aprender, evolucionar, estudiar, analizar,
profundizar y buscar la didáctica apropiada para trasladar lo aprendido a sus
alumnos.
·
No se llega a ser maestro solo por imitar una
serie de secuencias de movimientos, se necesita dominar lo aprendido, eso se
llama maestría. Quien imita, es solamente un alumno en su etapa más primitiva
de movimiento. Aprender formas, katas, poomse, kwons, técnicas de defensa,
wazas, etc. no me garantiza la maestría o la obtención de un grado, el
conocimiento es vano, efímero, fugaz, si no va sostenido por la comprensión y
el entendimiento de las cosas.
·
Aprender artes marciales no es coleccionar
cintas de tal o cual color, no es coleccionar grados, títulos o diplomas de
muchas organizaciones, que tampoco digo que sean malos, todos tenemos derecho a
progresar y contar con el respaldo de amigos, maestros y organizaciones que den
fe de nuestro buen desempeño. Pero la verdadera responsabilidad de un maestro
es no solo tener lo anterior, sino poder desenvolverse no solo como buen
practicante, sino como alguien capaz de formar a otros maestros. Para ponerlo
en palabras sencillas, un buen árbol de manzanas, debe dar buenas manzanas que
a su vez, tengan buenas semillas que lleven su linaje para producir no solo
frutos sino tener la capacidad de producir más árboles que den más frutos y más
árboles sucesivamente. Un maestro debe ser capaz de formar maestros.
Yo sé que aún estamos iniciando
una nueva era para la humanidad, quizás muchos piensen que esto va a pasar
pronto, pero sin ánimo de desanimarte, déjame decirte que aunque pase y nos
presenten una solución mediata o inmediata, como humanidad nos enfrentamos a
una etapa de cambios y debemos adaptarnos, aquí cobra mucha vigencia lo que
siempre enseñamos a nuestros niños:
Disciplina es hacer las cosas
bien, porque yo quiero que me salgan bien, no necesito alguien que me presione
o me vigile, porque yo sé que debo buscar la excelencia.
Te invito a seguir buscando
aprender, a no detenerte en tu camino de artes marciales, a seguir progresando
y no permitir que estas circunstancias afecten tu salud y tus buenas
costumbres, quédate en casa, pero mantente activo!
Bendiciones