ARTES MARCIALES Y DOLOR DE ESPALDA
Si alguna vez has pesado que practicar artes marciales es un riesgo para tu
salud, si ese dolor de espalda ha sido un obstáculo para que inicies un
entrenamiento, temes agravar esa dolencia debido a un entrenamiento demasiado intenso?
Los recientes estudios y programas de tratamiento pueden hacer que cambies
de opinión.
Antes de continuar escribiendo, quiero hacer patente mi respeto por la profesión
médica y quienes la ejercen, es más, quiero hacer notar que una de mis alumnas más
destacadas es profesional de la medicina y de hecho ha padecido de problemas de
hernias cervicales. Es decir, no estoy escribiendo nada en contra de los
médicos, pero a lo largo de mi carrera como instructor (aprox. 31 años) he
podido ver que son realmente ESCASOS los médicos que recomiendan la práctica de
artes marciales a sus pacientes, quizás debido a la mala fama de las mismas, o
a la propagación de la idea de que todo redunda en el "Karate
Deportivo".
Según algunas publicaciones respetables de la salud, basándose en estudios
serios realizados, se estima que anualmente, 65 millones de personas padecen de
algún dolor de espalda que limita en gran manera sus actividades y reduce su
productividad en las diversas actividades en las que se desarrollan dentro de
la sociedad moderna. Es impresionante que las estadísticas nos indiquen que, es
la segunda causa de las consultas médicas, después de la gripe y el resfrío.
Asombrosamente afecta a ocho de cada diez adultos alguna vez en su vida.
Pero no hay que alarmarnos, ni considerar exageradas estas cifras, yo
personalmente, he padecido de dolor de espalda en más de una ocasión, causada
por las tensiones del tráfico, los períodos prolongados sentado n el vehículo,
las colas de espera en distintas clases de establecimientos, entre otras cosas.
Ahora bien, lo que me mueve a escribir estas líneas es plantear una
alternativa que permita aliviar este padecimiento...
De acuerdo a estudios realizados -aunque te parezca asombroso- la “mejor
medicina” puede ser un entreno agotador, especialmente para aquellos que
padecen de un dolor crónico (entiéndase por crónico, un dolor que se manifiesta
por dos meses o más) .
Nuestra reacción natural al sentir dolor de espalda es limitar el
movimiento, porque recibimos un mensaje corporal que nos dice “no te muevas”. Sin
embargo, un programa de entrenamiento intenso apropiado (guiado obviamente por
un verdadero instructor profesional, no empírico) puede ayudarnos a fortalecer
y estirar los músculos de la espalda. Además, el ejercitarnos aumenta el flujo sanguíneo,
acelerando los procesos curativos de nuestro cuerpo, aliviando también la tensión
que es mayormente el causante de estos dolores.
Está por demás decir que las artes marciales proveen de un entrenamiento
mental, que con el tiempo y la práctica constante nos ayuda a aumentar nuestra
barrera del dolor y esto nos ayuda a interpretar de diferente forma esas
señales corporales, cambiando el mensaje de “no te muevas” por un nuevo mensaje
que nos dice “necesito liberarme de esta molestia, aumentar mi oxigenación y
acelerar un proceso curativo”.
Entonces, las artes marciales (no por fuerza “karate deportivo”) con su combinación
de ejercicios mentales, cardiovasculares, respiratorios y musculares, pueden
ser una alternativa ideal para las personas que padecen de problemas de
espalda. Por supuesto, te recomiendo consultar a tu médico antes de iniciar
cualquier programa de entrenamiento físico, y si optas por la práctica de este
hermoso arte, verifica las credenciales y la carrera de tu posible
instructor, obviamente, deberás hacerle
notar tu padecimiento antes de la primera clase, de manera que sepa como
conducirte a lo largo de cada entreno.
Bendiciones!
Mario A. Lorenzana